Desde cualquier punto de la Vega granadina se observa este torreón que rompe con la silueta natural de Sierra Elvira. En el extremo más oriental de la formación montañosa se situa esta atalaya que formaba parte del sistema defensivo de la ciudad de Granada. Desde ella se controlaba el paso por el rio Cubillas y casi toda la extensión de la Vega. Hoy en día su función es de balcón natural divisando maravillosos paisajes sobre la capital, toda la depresión del rio Cubillas y la Sierra Elvira con la ermita de los tres juanes, además de ser un ideal escenario para un agradable paseo por la naturaleza.
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La última vez que subí fue hace bastantes meses y, la verdad, lo encontré bastante deteriorado. Ahora ha mejorado, especialmente con la iluminación nocturna, muy conseguida.
ResponderEliminarCasualidades de la vida, lo veo todos los días porque mi área de trabajo en la zona de Vegas Altas. La imagen al atardecer de la Ermita de los Tres Juanes, Sierra Elvira y el Torreón es de postal :)
Gracias por seguir acercándonos tantas maravillas, muchas de ellas desconocidas para la mayoría.
Hace 8 años que subí por última vez y la he visto muy cambiada de como la recordaba. Sobre todo en los accesos y el acondicionamiento del lugar. Por los pegotes de cemento que se ven en la base de la torre parece que la han restaurado hace poco con más voluntad que rigor ya que en teoría se deberia usar mortero de cal como se hacía en su epoca para que quede igual. Pero menos da una piedra, nunca mejor dicho, así que celebro que se preocupen por esta torre.
ResponderEliminarEa, ya me estrene opinando Samuel :p
Me alegro que se haya estrenado usted, espero verle en muchas más ocasiones. Por lo que respecta a la torre ya le dije que los acondicionamientos que han realizado los veo acordes y creo que no rompen con el equilibrio natural del entorno. Y menos da una piedra, mejor que no se conservarse nada o casi nada como en otros casos, ahí está presidiendo el día a día de la ciudad como es el caso de lunaazul. saludos.
ResponderEliminarYa, yo tambien creo que el acondicionamiento de la zona ha sido un gran acierto. Con lo del cemento ya sabes lo que opino, lo mejor a la hora de restaurar es usar los mismos materiales de cara a su mejor conservación. Otra cosa que habría que mejorar es la protección pues el vallado actual tiene mas agujeros que un queso gruyere, y por ahí entra cualquier desaprensivo a llevarse una piedra.
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